Sistema de alimentación ininterrumpida (SAI): seguridad de suministro eléctrico y protección de equipos
Un sistema de alimentación ininterrumpida (SAI) tiene como objetivo principal asegurar el suministro eléctrico de determinadas cargas, tales como equipos informáticos, cruciales para garantizar el normal funcionamiento de una actividad empresarial dada. Un ejemplo típico lo tenemos en las farmacias, donde la red de ordenadores conectados a un servidor sencillamente no puede fallar.
Pero, ¿un SAI únicamente se encarga de garantizar el suministro haciendo uso de una batería lista para conmutar y entrar en acción en caso de fallo de red? En función del tipo de SAI que se elija no sólo aseguraremos la alimentación eléctrica, sino que además se aportará suministro de calidad a los equipos elegidos, lo cual redundará en la seguridad y protección de los mismos.
Repasemos los tipos de SAI que existen:
> Off Line. El SAI únicamente actúa en caso de fallo de red, es decir, si dejamos de recibir electricidad de la red de distribución. En esta situación, las cargas se alimentan a través de la batería del SAI (previo paso por un inversor) hasta que se reestablece la tensión de entrada.
> Line Interactive. Similar a la modalidad Off Line, pero intercalando una etapa de filtrado y estabilización. Con este tipo, eliminamos parte de las interferencias de la red pero seguimos teniendo un tiempo de paso entre red y batería.
> On Line Doble Conversión. Los equipos protegidos siempre están alimentados por el SAI - eliminándose los tiempos de paso entre red y batería - garantizando además la máxima calidad de suministro: se eliminan todas las posibles interferencias de red, y la señal que llega a los equipos objeto es siempre la mejor posible independientemente de que alimente la red o la batería. Se evitan, por ejemplo, las sobretensiones (no siempre contamos con una protección de sobretensiones eficaz para equipos electrónicos en cuadro), los microcortes, el ruido, la tensión insuficiente o las corrientes armónicas.
Si pensamos en el ejemplo de la farmacia, donde la red informática y las comunicaciones suponen una aplicación crítica, el modelo más aconsejable será el On Line Doble Conversión, garantizando así el suministro eléctrico en caso de fallo y protegiendo a los equipos a través de una alimentación eléctrica libre de interferencias. En otro tipo de aplicaciones menos cruciales, o donde los equipos sean de menor sensibilidad, se valorará la elección de un Off Line o de un Line Interactive.
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Publicado por Luis Cazorla
Ingeniero Técnico Industrial e Ingeniero Químico
Ingeniería e instalaciones sostenibles. Monitorización y gestión de energía. Soluciones de ahorro energético en sistemas nuevos o existentes.